La mayoría de las muertes se han producido en las barriadas más pobres de la ciudad.
Al menos 65 personas han muerto en los tres últimos días en la ciudad de Karachi, en el sur de Pakistán, debido a la ola de calor que ha provocado temperaturas de hasta 44 grados, según ha informado una organización humanitaria, la Fundación Edhi, que alerta de que la cifra de víctimas podría aumentar. Las temperaturas no remitirán al menos hasta el jueves. La ola de calor ha coincidido además con una serie de averías que han dejado sin suministro eléctrico a parte de la población y con el mes sagrado musulmán del Ramadán, en el que los musulmanes ayunan durante las horas de luz. Un portavoz de la Fundación Edhi, Faisal Edhi, explicó que la mayoría de las muertes se han registrado en las barriadas más pobres de la ciudad. La fundación gestiona tanatorios y un servicio de ambulancias.